Supongamos
que estás jugando futbol con tus amigos y de pronto uno de ellos da un balonazo.
Como si fuera cámara lenta puedes ver como el balón va directo a tu cara pero
lleva tanta velocidad y fuerza que no tienes oportunidad de quitarte, lo único que
puedes hacer es cerrar los ojos, apretar los dientes y esperar el golpe en el
rostro. Así se siente esta película, a excepción de que el balonazo no te da en
la cara sino en los genitales, repetidamente, por casi dos horas continuas.
Cambio de
Ruta nos cuenta la historia de… No ¿Saben qué? Al diablo con eso. Esta vez no
voy a decir de que se trata, solo vean el tráiler que siempre pongo al final de
la reseña y verán todo lo que tienen que saber sobre esta producción y si
tienen más de dos neuronas o han visto una película, cualquier película en su
vida, sabrán perfectamente de que se trata y a donde se dirige la historia.
Voy a decir lo
único que se me ocurre que puede ser remotamente redimible sobre el film: Es un
promocional turístico para la Riviera Maya de 100 minutos, metiendo una “comedia
romántica” para intentar disimular que es un comercial de turismo. Y si la comparación
de una película con un comercial barato no les dice nada sobre la calidad de la
producción, déjenme explicar algunos de los muchos, muchos problemas de esta película.
La historia
no podría ser más cliché si lo intentara, sacada de cualquier comedia romántica
gringa de hace 20 años, y por si fuera poco manejada de la peor manera posible:
como una telenovela barata de la televisión mexicana. Los personajes son más
planos y aburridos que una hoja de papel en blanco y la actuación de todos los involucrados
no ayudan en nada cuando todos ellos no hacen ni el más mínimo esfuerzo por
actuar, unos niños en un festival de día de las madres podrán ser malos actores
pero por lo menos harían un esfuerzo, a diferencia de estos “actores”. De los
actores y actrices (pa ser políticamente correcto) no hay ni por donde escoger,
todos son pésimos, pero el que se lleva las palmas es Osvaldo de León, que
demuestra que ser bien parecido y carente de cualquier tipo de talento más allá
de verse bien ante la cámara no es un mercado acaparado solo por actrices de telenovelas.
¡Y los diálogos! Por Cthulhu, son los más forzados, mal escritos y mal
ejecutados que he escuchado en mucho tiempo, siempre tratando de provocar
gracia en el espectador y fallando miserablemente en ello. En el mejor de los
casos solo dan pena ajena.
Los
escenarios muy bien utilizados, sacados directamente de una revista de turismo,
con la gran excepción de una escena “romántica” que usa un “green screen”
completamente fuera de lugar y tan mal ejecutado que no puede pasar desapercibida
por más que lo intenta.
Toda la producción
hace el mínimo esfuerzo para presentarnos lo que supuestamente es una película.
Y hay quien dirá que la película no es mala para ser una película mexicana. A quien
diga eso, debo responder enfáticamente: No, no lo es, bajo ningún criterio esta
cosa es una buena película, y el hecho de que se espere una mayor o menor
calidad en una producción cinematográfica de acuerdo con su país de origen es
una estupidez, una que por mucho tiempo se ha utilizado para tratar de
justificar la mediocridad del cine mexicano. Y ese es precisamente el
calificativo más adecuado para Cambio de Ruta: Mediocre.
No hay nada
que pueda decir para recomendar ver en el cine lo que prácticamente es una muy
mala telenovela. No soy nadie para juzgar, después de todo en gustos se rompen géneros,
debe de haber a quien le gusten este tipo de producciones (por algo se siguen
haciendo) y si ese es el caso, no hay nada malo en ello ¡Disfruten su película!
Muchas de las cosas que yo disfruto no son precisamente inteligentes. Lo único que
digo es que no traten de verme a los ojos y decirme que esto es un producto de
calidad.
Si
Obediencia Perfecta me había hecho recuperar un poco la fe en el cine mexicano,
Cambio de Ruta ha logrado quitarme esa fe. Esta es la peor película que he
visto en todo lo que va del año.
Cambio de
Ruta: 3/10 (esos tres puntos son solo por los escenarios de la Riviera Maya y
nada más)
Mejor que:
Esa otra película mexicana que cuyo nombre no quiero acordarme.
No tan buena
como: Amar te Duele (si, ya sé que la comparación es rara, y de hecho Amar te
Duele es una película que detesto, pero aun así es una mejor película que esta porquería)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario