Todas las películas
que forman parte alguna propiedad intelectual basada en monitos chinos tiene el
mismo problema: Está enfocada a dar gusto a espectadores que de antemano ya están
familiarizado con el material original y hace poco o nada por atraer la atención
de nuevo público. Dragon Ball Super :
Broly cuenta con este mismo “problema”, aunque tal vez, sólo tal vez, el
hecho de que gran parte de su historia sea trate de un precuela sea suficiente
para llamar la atención de una que otra persona cuyo primer contacto con el
mundo de Koku y compañía sea mediante esta película.
En Dragon Ball Super: Broly veremos a Goku
y compañía enfrentarse a su enemigo más poderoso hasta la fecha… por lo menos
hasta la próxima semana en que aparezca uno a un más fuerte porque así es como
funciona Dragon Ball, no nos engañemos. Muchos años antes de la destrucción del
planeta Vegeta a manos del malvado emperador galáctico Freezer, un Sayajin con
un poder extraordinario fue exiliado a un inhóspito planeta, algo que irónicamente
termina por salvarle la vida. Muchos años después Freezer se topa con ese
Sayajin llamado Broly, y al darse cuenta de su enorme poder decide utilizarlo
como un arma contra sus odiados enemigos Goku y Vegeta.
La cinta se
divide en dos partes muy definidas, la primera siendo lo más parecido a una película
de verdad, presentándonos personajes nuevos y mucho ya conocidos en una historia
simple pero entretenida que puede no ser del todo nueva, muchos detalles ya son
conocidos por aquellos que somos fans de Koku, pero hay que admitir que ver
esta historia llena de referencias a eventos pasados y futuros en la pantalla
grande es un deleite para cualquier fan de la serie. La segunda parte es una
pelea entre los personajes, nada más y nada menos, lo cual dependiendo de su
propio punto de vista puede ser sorprendente o muy aburrido, ya que en verdad
no ocurre nada relevante en la segunda mitad de la película más allá de weyes súper
poderosos agarrándose a golpes unos a otros durante casi una hora, algo repetitivo,
sí, pero muy entretenido si se es fan.
Sé que pedir
personajes complejos en una historia de Dragon Ball es como esperar una buena
historia en una película porno, pero aun así debo decir que esta nueva interpretación
de Broly me sorprendió al menos un poco. Cierto, el personaje dista mucho de
ser Shakesperiano, pero logra ser más interesante que el típico villano en este
tipo de historias, es más, de hecho podría argumentarse que Broly es el
verdadero protagonista más que el propio Koku, siendo casi una figura trágica por
su propia cuenta ¿Estoy exagerando? Tal vez un poco, pero en verdad que este
personaje muestra mucho potencial si es que alguna vez se decide continuar con
su historia.
Sé que querrán
crucificarme por decir lo siguiente, pero la animación, algo que debería ser el
punto fuerte de Toei Animation después de tantos años de trayectoria, deja
mucho, MUCHO que desear. Algunas escenas son geniales, casi como para
enmarcarlas y colgarlas en la sala de tu casa, sin embargo hay otras tantas en
que los personajes son poco más que manchones con vaga forma humanoide que
parecen dibujados por un niño ciego con crayones sobre papel de baño. Esta
irregularidad en el dibujo y la calidad de la animación es constante, y puede
que no sea la gran cosa para la mayoría, pero a mí no deja de incomodarme. Una
franquicia tan longeva y querida por prácticamente todo el mundo merece mejor atención
y cuidado que lo que se deja ver aquí.
No hay mucho
que decir. Dragon Ball Super: Broly
es otra película de Dragon Ball (duh)
con todo lo bueno y malo que eso implica: historia simple pero entretenida,
personajes demasiado sencillos, acción estrepitosa que se ve arruinada de vez
en cuando por mala animación, peleas creativas acentuadas por buena animación,
la película tiene un poco de todo. Si son fans de la serie no tengo que
decirles que la vean, probablemente ya lo hicieron, y para aquellos que no estén
familiarizados con la franquicia, vean tranquilamente la primera mitad de la película,
coman sus palomitas, beban su refresco y cuando la pelea principal comience
vallan al baño, rellenen sus palmitas y refresco, háganle platica a la cajera
(o cajero) de la dulcería, y después regresen a la sala para ver el desenlace
ya que en ese “intermedio” no ocurre nada relevante para la trama.
Esta es la
parte en la que le doy una calificación del 0 al 5 a la película, pero esta
franquicia está muy cerca de mi podrido corazón como para siquiera fingir que
puedo ser del todo imparcial, así que tengo que darle dos calificaciones
diferentes.
Primero como
fan de hueso colorado de la serie.
Dragon Ball Super: Broly: 3/5. Buena.
Ahora como
adulto amargado que finge saber sobre cine.
Dragon Ball Super: Broly: 1/5. Mala.
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